Por León Gabriel Cartagena Sanguinetti
El 8 de octubre celebramos el Día del Servicio Leonístico, una fecha que invita a reconocer el esfuerzo y la entrega de miles de voluntarios que, con humildad y compromiso, dedican su tiempo a mejorar la vida de los demás. Ser León es servir desde el corazón, y en Salto ese espíritu solidario se refleja en cada obra, en cada gesto, en cada acción.
Los Clubes de Leones trabajan incansablemente en diversas áreas sociales, educativas y de salud. Los hogares estudiantiles ofrecen un espacio digno para jóvenes del interior que vienen a estudiar, el préstamo de elementos ortopédicos brinda apoyo a quienes enfrentan limitaciones físicas, y el merendero “Andresito” es un símbolo de contención y esperanza para muchos niños y familias.
También se desarrolla un importante trabajo en salud mental, con talleres y atención especializada, promoviendo el bienestar emocional y la integración comunitaria. Este compromiso con la salud integral demuestra que el leonismo no solo asiste, sino que transforma realidades.
A través de programas como Leones Educando, el Programa Salvador, los Clubes Leo y los Clubes de Cachorros, se forma a las nuevas generaciones en valores de solidaridad, empatía y servicio. Porque ser León no es un título: es una actitud de vida, un llamado a actuar con el corazón y a servir sin esperar nada a cambio.
En este 8 de octubre reafirmamos que el servicio leonístico es una fuerza transformadora. Los Leones somos voluntarios, pero sobre todo, somos agentes de cambio que creemos en un mundo mejor.
Donde hay una necesidad, hay un León.