(CNN) — Es una opción que nadie quiere, pero podría convertirse en una “dura realidad”: una segunda ola de cierres por coronavirus.
Semanas después de levantar las órdenes de confinamiento, algunos estados de Estados Unidos están viendo un número récord de hospitalizaciones por covid-19 a medida que miles de estadounidenses se contagian todos los días.
“Vamos a tener que enfrentar la dura realidad en algunos estados de que tal vez necesitemos cerrar nuevamente”, dijo Jonathan Reiner, profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad George Washington.
Y la segunda ola de cierres estatales podría ser más dañina que la primera.
“Debido a la fatiga por la cuarentena, debido a los efectos económicos de la cuarentena, otra ronda de cierres podría tener efectos aún mayores en las empresas que podrían estar al borde de no poder mantenerse solventes”, dijo Christopher Murray, director del Instituto de Medición y Evaluación de la Salud de la Universidad de Washington.
El costo económico de una sola ronda de cierres ha sido asombroso. Más de 44 millones de personas en Estados Unidos han presentado solicitudes iniciales de subsidio de desempleo desde mediados de marzo.
Pero la pandemia está lejos de terminar. Más de 115.000 estadounidenses han muerto por coronavirus, y cientos más mueren a causa del virus todos los días.
“El covid no se va de vacaciones de verano”, dijo William Schaffner, experto en enfermedades infecciosas y profesor del Centro Médico de la Universidad de Vanderbilt.
“En realidad está teniendo nuevas oportunidades para difundirse”.
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Murray dijo que la “opción más grande y más difícil” que los estados podrían enfrentar en los próximos meses es administrar un potencial segundo cierre.
Y las consecuencias de otro confinamiento serían muy amplias, dijo el secretario del Tesoro de los Estados Unidos, Steven Mnuchin.
“No podemos cerrar la economía de nuevo”, dijo Mnuchin a CNBC. “Creo que hemos aprendido que si cierras la economía, vas a crear más daños. Y no solo daños económicos, sino… problemas médicos y todo lo demás que se pone en espera”.
Pero el Gobierno federal no ha estado en control de cierres y reaperturas. Esos han sido a discreción de cada estado.
“Si se quedan sin camas de hospital y se quedan sin camas de cuidados intensivos… [los estados] tendrían que cerrar”, dijo Reiner.
Ya sucedió antes
Las segundas tandas no solo son posibles, sino que ya han sucedido en algunas partes del mundo durante esta pandemia.
Hong Kong y Singapur parecían tener el coronavirus bajo control y comenzaron a aliviar las restricciones, solo para tener resurgimientos importantes que condujeron a reglas más estrictas.
La segunda isla más grande de Japón, Hokkaido, también cerró para controlar la propagación del coronavirus. “Pero abrieron demasiado rápido”, dijo Reiner, lo que llevó a un regreso del covid-19.
“Cerraron de nuevo. Y así es como extinguieron el virus”.
Cómo los estadounidenses pueden evitar otra ronda de confinamiento
Si bien los estados intentan revivir la economía, el destino de esta pandemia depende en gran medida de los individuos.
“La gente debe seguir las pautas de seguridad”, dijo el asesor económico de la Casa Blanca, Larry Kudlow.
“Debe seguirse el distanciamiento social. Deben seguirse usando las mascarillas en lugares clave”.
El uso de una máscara facial es fundamental para disminuir la propagación del coronavirus debido a lo fácil que es infectar a otros, incluso sin ningún síntoma.
“Tenemos que tomar medidas ahora para evitar un cierre en el futuro”, dijo Lina Hidalgo, jefa de Gobierno en el condado de Harris, Texas, el tercer condado más poblado de Estados Unidos.
Al igual que muchas partes del país, el condado de Harris ha visto un aumento repentino en las hospitalizaciones por covid-19 desde el fin de semana del Día de los Caídos.
“Eso solo sigue creciendo”, dijo Hidalgo el viernes.
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Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, dijo que “lo mejor que se puede hacer es evitar las zonas abarrotadas”.
“Pero si no vas a hacer eso”, dijo, “por favor usa un tapabocas”.
Por Holly Yan