El Bono Social de Energía Eléctrica, implementado por UTE y el Ministerio de Desarrollo Social (Mides), llegó a 113.829 hogares de contexto socioeconómico vulnerable. Este descuento en las facturas implica un incremento de 59% en el número de contemplados, hasta diciembre de 2021, por las tarifas bonificadas de UTE.
La medida, que comenzó a regir en enero de 2022 en todo el país, está destinada a participantes de los programas del Mides y el Plan de Inclusión Social de UTE, informaron ambas instituciones en un comunicado, divulgado este jueves 10.
En dos meses, la bonificación alcanzó a 77.322 hogares con planes del ministerio: 34.353 beneficiarios de la tarjeta Uruguay Social, 42.121 de asignaciones familiares del Plan de Equidad y 848 del de Asistencia a la Vejez.
A eso se suman 36.507 usuarios con distintas tarifas especiales de UTE: 24.752 correspondientes al Plan de Inclusión Social, 5.695 al convenio con el BPS y 6.060 exbeneficiarios del Mides. Los descuentos de febrero representan unos 145 millones de pesos.
La medida promueve la regularización de los servicios en aquellos lugares donde aún persiste un alto grado de informalidad. También estimula el consumo eficiente, regular y seguro, con costos accesibles para los sectores más vulnerables de la población.
Con este beneficio, los usuarios de la tarjeta Uruguay Social obtienen un descuento en la factura de UTE de 90% u 85%, según sea doble o simple, respectivamente.
Quienes están contemplados en las asignaciones familiares del Plan de Equidad, el de Asistencia a la Vejez y el de Inclusión Social de UTE reciben una bonificación de 80% en todos los conceptos de la factura de UTE. En tanto, los clientes con tarifas especiales pasaron a ser beneficiarios del Bono Social desde enero pasado.