No reconocer el estado en que están los animales en el Zoológico, así como también el maltrato al que son sometidos (no por parte de funcionarios, sino por la forma en que se los obliga a vivir), es estar realmente ciego.
Los Zoológicos son una práctica añeja que comienza en el año 1500 como ‘‘colección de animales’’ que alguien tenía y hasta el día de hoy sigue siendo así, aún se quiera pintar de otra manera el asunto. Estos animales al estar encerrados allí, desarrollan conductas autodestructivas y hasta demencia, producida por el aburrimiento, la privación de movilidad y hacinamiento. Así como también puede pasar todo lo contrario, que el animal entre en una gran depresión por diversos factores como puede ser la soledad. Decir que algunos zoológicos son cárceles para los animales no es una atrocidad, de hecho, lo son.
Hoy Salto no tiene la capacidad para tener un zoológico que se haga garante de que los animales puedan moverse libremente, interactuar, etc. No puede ser garante de darle un buen desarrollo a cada animal que está allí. Esto no es culpa de los funcionarios, es culpa de la gestión que la IDS está llevando a cabo. ¿Es necesario tener que ponerle un aire acondicionado a una Osa para que pueda sentirse como en su hábitat natural? Es poco serio.
Es necesario que los animales que no pueden vivir en nuestro hábitat debido a la temperatura de nuestra ciudad (por ejemplo), no estén más en Salto. ¿Qué culpa tiene el animal de estar siendo utilizado como entretenimiento mientras está pasando mal? Este entretenimiento que son los zoológicos, es un entretenimiento añejo, viejo, que hoy ya no puede ser permitido. No creemos que un niño pueda aprender de animales, viéndolos tras rejas y a su vez, viéndolos tristes. Hay que ser conscientes de que no todos los animales pueden vivir en un zoológico urbano.
Por eso es que con LEAL INTENDENTE planteamos la reformulación del Zoológico Municipal de Salto. Queremos transformarlo en algo realmente sano para los ciudadanos y para los animales. Nuestra propuesta (una de las tantas incluidas en nuestro programa de Renovación de Espacios Verdes) se basa en empezar a valorar los espacios públicos y más todavía los que tienen gran historia como lo es el predio del Parque Harriague, porque sabemos el valor que para los Salteños tienen los espacios públicos y estos tienen que ser un lugar de disfrute para todos los habitantes, así como también eficiente en el gasto.
El Zoológico debe dejar de funcionar como tal y en cambio, debemos darle un funcionamiento más humano con un enfoque moderno, social y ambiental. Que a su vez, eduque y respete a la naturaleza. Porque esta propuesta, no es un capricho de cerrar el zoológico porque si. Es una propuesta global que trata lo social y educativo ya que promovemos la utilización de juegos interactivos para que los niños conozcan animales sin tener que verlos encerrados, así como también aprovechar el tipo de suelo que tiene el Parque Harriague para la implementación de senderos que pueden ser utilizados para hacer deporte y generar conciencia sobre las enfermedades cardiovasculares. Mejorar los espejos de agua, fomentar los espectáculos y hacer de este histórico Parque un ejemplo de responsabilidad ambiental.
Este espacio público que le pertenece a todos los Salteños, debe dar el ejemplo. Debemos aprovechar la naturaleza autóctona de manera inteligente.
Seamos la renovación responsable.
Facundo Esteche
