Varios funcionarios de la Dirección Nacional de Migración son investigados por una presunta red de tráfico de personas.
Un ciudadano cubano relató a Subrayado la experiencia que vivió desde que salió de su país hasta que llegó a Uruguay sin pasar por migración.
El ciudadano contó que en Cuba existe una “libre visado a Guyana” que le permite estar en el país durante siete días hábiles de forma legal. “Pero muchos de nosotros emigramos y seguimos brincando frontera para llegar a un país como es Uruguay, que nos permite la entrada”.
Para poder llegar el país, el cuidadanos relató que esa travesía desde Guyana la hacen con un “coyote”, quien les cobra 1.200 dólares por persona. “Esa plata se le entrega a una persona que nos recibe en el aeropuerto de Guyana y se encarga de ir manejando que otra persona nos lleve a la frontera” contó.
En la frontera con Guyana, los ciudadanos cubanos se toman una avioneta hasta Linden, “ahí nos espera otra persona que es brasileña que nos lleva para una casa, nos atienden y luego nos montan en un ómnibus y luego un taxi hasta Rivera”.
“Nunca nos llevan a la frontera a pedir asilo, esas cosas las hacemos nosotros solos” y agregó que “saltan de frontera en frontera”. “El riesgo que esa poca plata la podemos perder en ese momento en Guyana” dijo el ciudadano.
Investigación administrativa
Debido a esta situación, varios funcionarios de la Dirección Nacional de Migración están siendo investigados a nivel interno y por la Fiscalía en relación en una presunta red de tráfico de personas en la frontera con Brasil.
La investigación administrativa está en curso desde marzo e involucra a varios funcionarios de la Dirección Nacional de Migración, según pudo confirmar Subrayado hasta el momento no hay sumarios por esta causa.
La denuncia la hizo un subcomisario que acusa a varios policías de recibir dinero a cambio de dejar pasar a cubanos que ingresan al país desde Brasil sin papeles, por la frontera del Chuy, Río Branco y Rivera.
Se presume que los extranjeros llegan al país brasileño a través de Guyana y ya en Porto Alegre (a donde ingresan en avión) se activa una presunta red de tráfico de personas que involucra a choferes de uber, taxis y autos de alquiler que levantan a los cubanos y los trasladan de a siete hasta la frontera uruguaya, donde se supone que los funcionarios reciben coimas para dejar pasar a los indocumentados.
El caso también está siendo investigado a nivel de Fiscalía. El ministro del Interior, Jorge Larrañaga, sostuvo que tiene conocimiento del caso y que el mismo está siendo abordado por la cartera.
Por su parte, la Organización Internacional para las migraciones no recibió denuncia de la situación irregular del Chuy. Desde la OIM anuncian que los llamados de inmigrantes en Uruguay se multiplicaron por 10 durante la pandemia.
Fuente: www.subrayado.com.uy