Foto: Ricardo Antúnez, adhocFOTOS
La decisión se tomó luego de que el directorio rechazara una propuesta de la oposición para saldar sus deudas en cinco meses.
El directorio de ANCAP decidió por unanimidad encomendarle a su gerente general una semana para que negocie un cronograma de pago de las deudas que las intendencias de Salto y Cerro Largo tienen con la petrolera. Esta decisión se tomó luego de que los directores que representan al Frente Amplio en el ente, Juan Carlos Herrera y Laura Saldanha, presentaran una moción para que las comunas pagaran sus deudas en cinco cuotas, pero la iniciativa no fue acompañada por los restantes tres directores, que responden a la coalición de gobierno.
La reunión había sido pedida por el vicepresidente del ente, Herrera, luego de que se hiciera pública la decisión de suspender el suministro de combustible, pórtland y líquido asfáltico a la Intendencia de Salto por una deuda de 21 millones de pesos.
Además de la Intendencia de Salto, las comunas de Florida y Cerro Largo habían solicitado en marzo créditos especiales, pero no se les había concedido porque no estaban al día con pagos anteriores. A pesar de esa situación, ANCAP había comenzado negociaciones en los tres casos para lograr “una cancelación de la deuda que permitiera a cada comuna acogerse al crédito especial y mantener la operativa normal”, dijo el ente en un comunicado.
No obstante, sólo Florida logró acordar un convenio con el ente. Si bien Cerro Largo inició “una negociación para la cancelación de su deuda demostrando voluntad de pago e incluyendo la posibilidad de otorgar garantías reales a través de cesión de crédito”, ANCAP no aceptó una propuesta de la comuna el pasado 2 de junio, luego de que no se concretaran una serie de pagos. En tanto, Salto le comunicó al ente “la imposibilidad de pago o de ofrecer una garantía para realizar un convenio, por lo que, tal como se le había adelantado, se resolvió la suspensión del suministro”, sostiene el comunicado de ANCAP firmado el miércoles.
Según dijo el intendente de Salto, Alejandro Noboa, la deuda se produjo a partir de la baja de la actividad generada por la pandemia. “Nosotros teníamos nuestros ómnibus girando, prácticamente vacíos durante dos meses, pero cumpliendo con el servicio, tal como indica la obligación de la intendencia y como merece la población. No pudimos afrontar el pago de los consumos de ese momento y a partir de entonces se generó esa deuda”, explicó.
Fuente: La Diaria